ChatGPT y los vacíos legales a los que se enfrentan los usuarios

Las políticas de privacidad de estas compañías deben reflejar claramente sus prácticas en relación a la seguridad y la privacidad de los datos personales.

La utilización de IA generativas como ChatGPT, Bing Chat y otras, ha llevado a muchos usuarios a compartir información personal y confidencial sin tener en cuenta las políticas de privacidad y los términos y condiciones que rigen el uso de estas herramientas.

Ello ha generado preocupación por la vulnerabilidad de los datos personales que se comparten y por la falta de transparencia en el tratamiento de esta información.

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Recientemente, un problema técnico en ChatGPT expuso los títulos de las sesiones de chats de varios usuarios, lo que se considera una brecha de datos personales.

Según Sam Altman, director ejecutivo de OpenAI, el error provocó “un problema significativo” y mantendrá a los usuarios sin acceso a su historial durante un tiempo.

¿Es realmente un problema?

A diferencia de Google, que conoce nuestras búsquedas, ChatGPT conversa con nosotros y nos brinda la oportunidad de compartir información personal, como planes de ejercicio físico, dietas nutricionales, pedido de consejos o recomendaciones, apoyo emocional, entre otros.

Esto permite a las empresas analizar nuestros matices, la forma en que preguntamos, qué eludimos nombrar, qué repetimos constantemente, qué nos obsesiona, cómo reaccionamos a lo que nos dice, lo que se considera problemático desde el punto de vista de la privacidad y la seguridad de los datos personales.

ChatGPT ha sido diseñado para mantener el tono de una conversación y, aunque su objetivo no es dar respuestas veraces, es capaz de generar textos con un nivel de conversación similar al que usamos con un amigo o una persona cercana.

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Sin embargo, la cantidad masiva de textos recogidos de internet que alimentan a ChatGPT también es un problema, ya que estos textos pueden contener información privada que no debería ser utilizada sin consentimiento.

La privacidad de los datos personales es un aspecto clave en el uso de IA generativas como ChatGPT. OpenAI debe ser más transparente en cuanto al tratamiento de estos datos y explicar qué sucede con la privacidad y los derechos de las personas mencionadas en los textos que genera.

Las políticas de privacidad de estas compañías deben reflejar claramente sus prácticas en relación a la seguridad y la privacidad de los datos personales, y los usuarios deben ser conscientes de los riesgos y tomar medidas para proteger su información personal.