Tres de los cinco peores colapsos bancarios de la historia de EE. UU. ocurrieron en marzo.
El desarrollo de la crisis bancaria desde marzo ha expuesto la debilidad del sector financiero global, impulsando una enorme afluencia de inversión hacia los activos de finanzas descentralizadas (DeFi) y criptomonedas.
Pero a medida que los bancos centrales de todo el mundo planean revertir la postura monetaria agresivamente para aliviar los temores de liquidez, la popularidad de los activos alternativos podría aumentar aún más, perturbando el mercado financiero a “corto plazo”.
En los últimos años, el mundo ha sido testigo de un crecimiento sin precedentes en las criptomonedas, lo que ha llevado a un boom especulativo y a un aumento de la adopción.
Bitcoin ha sido adoptado como moneda oficial en algunos países y los NFT vieron miles de millones de dólares en volumen diario en el pico de 2021.
La oportunidad de Bitcoin
Al mismo tiempo, el sector bancario tradicional ha enfrentado numerosos desafíos, incluidas recesiones económicas, fallas institucionales y una creciente deuda. A medida que convergen estos dos dominios financieros distintos, aumentan las preocupaciones sobre la posible aparición de un cisne negro: la combinación de una crisis bancaria y un boom criptográfico.
Tres de los cinco peores colapsos bancarios de la historia de EE. UU. ocurrieron en marzo. La política agresiva de la Reserva Federal de Estados Unidos de aumentar las tasas de interés junto con políticas deficientes de gestión del crédito han desempeñado un papel significativo.
El inversor institucional multimillonario Warren Buffett afirmó que los problemas bancarios de Estados Unidos aún no han terminado.
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