CEO de OpenIA "estamos un poco asustados por el riesgo de las inteligencias artificiales"

"la mejor tecnología que la humanidad ha desarrollado hasta ahora".

Sam Altman, CEO de OpenAI, la compañía que desarrolló la controvertida aplicación de inteligencia artificial para consumidores ChatGPT, ha advertido que la tecnología viene con peligros reales a medida que moldea la sociedad.

Altman, de 37 años, enfatizó que los reguladores y la sociedad deben estar involucrados con la tecnología para protegerse contra las posibles consecuencias negativas para la humanidad.

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Tenemos que ser cuidadosos aquí", dijo Altman a ABC News el jueves, y agregó: "Creo que la gente debería estar contenta de que tengamos un poco de miedo de esto".

Las declaraciones

Estoy particularmente preocupado de que estos modelos puedan ser utilizados para la desinformación a gran escala", dijo Altman. "Ahora que están mejorando en escribir código informático, podrían ser utilizados para ataques cibernéticos ofensivos".

Pero a pesar de los peligros, dijo que también podría ser "la mejor tecnología que la humanidad ha desarrollado hasta ahora".

La advertencia llegó cuando OpenAI lanzó la última versión de su modelo de inteligencia artificial de lenguaje, GPT-4, menos de cuatro meses después de que se lanzara la versión original y se convirtiera en la aplicación para consumidores de mayor crecimiento en la historia.

En la entrevista, el ingeniero de inteligencia artificial dijo que aunque la nueva versión no era "perfecta", había obtenido una puntuación del 90% en los exámenes de abogacía en los Estados Unidos y una puntuación casi perfecta en las pruebas de matemáticas de la escuela secundaria SAT.

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Los temores sobre la inteligencia artificial para consumidores, y la inteligencia artificial en general, se centran en que los humanos sean reemplazados por máquinas. Pero Altman señaló que la IA solo funciona bajo la dirección o entrada de los humanos.

"Espera a que alguien le dé una entrada", dijo. "Esta es una herramienta que está muy controlada por los humanos". Pero dijo que tenía preocupaciones sobre qué humanos tenían control de la entrada.

"Habrá otras personas que no pongan algunos de los límites de seguridad que ponemos", agregó. "La sociedad, creo, tiene un tiempo limitado para descubrir cómo reaccionar ante eso, cómo regularlo, cómo manejarlo".

El CEO de Tesla, Elon Musk, uno de los primeros inversores en OpenAI cuando todavía era una organización sin fines de lucro, ha emitido repetidas advertencias de que la inteligencia artificial o AGI -inteligencia artificial general- es más peligrosa que una arma nuclear.

Musk expresó su preocupación de que Microsoft, que aloja ChatGPT en su motor de búsqueda Bing, había desmantelado su división de supervisión ética. “No hay supervisión regulatoria de la IA, ¡lo cual es un gran problema”.