Tras conocerse la noticia, se registró un inusual aumento en los precios de ciertos tokens digitales vinculados a la franquicia Dragon Ball. Un ejemplo destacado es el ‘Dragon Ball Token’, un activo no oficial que fue lanzado en mayo de 2023 en la red BNB Smart Chain.
Akira Toriyama, renombrado artista de manga y diseñador de personajes japonés es mundialmente conocido por ser el creador de obras como “Dragon Ball” y “Dr. Slump”, series de manga y anime sumamente populares y mundialmente exitosas de todos los tiempos.
Toriyama es considerado por muchos como “el padre del shonen”; y, aunque no lo sea estrictamente, su influencia como mangaka ha sido fundamental para el desarrollo y popularización de este género. Sin embargo, el día 7 de marzo, se dio a conocer la noticia de que el legendario mangaka había fallecido, aunque tenía desde el 1 de marzo en pasar a otra vida.
Esta criptomoneda aumentó su valor tras la muerte de Akira Toriyama.
Con esto en mente, cientos de reacciones circularon en Twitter y otras redes sociales; medios de comunicación se despidieron de quien fue parte fundamental en su infancia; y así, un nuevo token, empezó a surgir y cobrar vida tras la muerte de Akira Toriyama
Tras conocerse la noticia, se registró un inusual aumento en los precios de ciertos tokens digitales vinculados a la franquicia Dragon Ball. Un ejemplo destacado es el ‘Dragon Ball Token’, un activo no oficial que fue lanzado en mayo de 2023 en la red BNB Smart Chain. En un fenómeno sorprendente, su precio se multiplicó por 11 en apenas 3 horas, reflejando la volatilidad y la especulación que rodean a este tipo de activos.
Es importante señalar que estos tokens no oficiales no tienen ningún vínculo directo con la franquicia Dragon Ball ni con sus creadores, y su liquidez es baja, lo que incrementa aún más su volatilidad y riesgo para los inversores. Este fenómeno no es nuevo en el mundo de las criptomonedas, con antecedentes de movimientos de precios similares relacionados con cambios en el copyright de personajes famosos, como Mickey Mouse.
La facilidad para crear tokens y asignarles nombres, junto con los vacíos legales en torno a la protección de marcas registradas en el ámbito de las criptomonedas, contribuyen a esta situación. Esto ha generado una advertencia sobre la confusión que pueden generar estos tokens no oficiales entre los inversionistas y los fanáticos, quienes podrían creer erróneamente que están respaldados o autorizados por los titulares de los derechos de las marcas.
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